Según un estudio realizado a 3.500 empleados de Reino Unido, Francia, Alemania, Japón y Estados Unidos por 12 expertos en innovación y transformación empresarial que se encargó antes del verano desde Google Enterprise a la Fundación Futuro, Internet va a cambiar de forma decisiva en la próxima década la organización interna de las empresas. Ese es al menos el análisis que hacían desde el Reino Unido en is4profit.

También lo comentaba unos meses más tarde Santiago Millán en el diario Cinco Días: ”Google parece convencido de que las nuevas tecnologías y herramientas de colaboración van a contribuir a la creación de nuevas categorías de puestos de trabajo en las empresas”. En este informe se analizan “las formas de trabajo que habrá en el año 2020, los puestos de trabajo del futuro”.

Y parece que éstos se encuadrarán en tres grandes categorías:

 Departamento de creatividad y gestión de Ideas.

- Departamento de recursos humanos.

- Departamento de información e innovación.

Respecto a los cambios en el ámbito de los recursos humanos en el futuro va a aparecer el cargo de director de sistemas humanos, que será responsable del departamento surgido de la fusión del área recursos humanos y del área de tecnologías de la información. El estudio señala que esta división tendrá la función de integrar de forma perfecta el proceso de interacción entre personas y ordenadores. Otra figura nueva será el llamado work-life balance manager, encargado de asegurar a los empleados un equilibrio positivo entre el trabajo y su vida profesional.

A su vez, surgirá también la figura del iCulturista, responsable de “enlazar todos los aspectos de la vida; mantener el bienestar del empleado además de asegurar el trabajo y las redes personales”. Según el informe, este puesto va a tener relevancia dado que deberá cuidar la cultura corporativa en un escenario de trabajo en el que los empleados van a estar destinados en diferentes oficinas. Finalmente, este departamento acogerá al estratega de gestión del talento, que tendrá un papel clave en la selección de los nuevos trabajadores.

Además existirá una imprescindible mayor colaboración entre el departamento de recursos humanos y el de información e innovación. En concreto el estudio revela una correlación del 81% entre la colaboración y la innovación, mostrando que a los empleados que más se les da la oportunidad de colaborar, contribuye con más ideas.

De todas formas el estudio también destaca que aún hay muchas organizaciones a las que les falta mucho por alcanzar un nivel de aprovechamiento de las nuevas tecnologías en sus procesos. Sólo el 12% de los empleados encuestados expresó su satisfacción con la tecnología a su disposición en el trabajo y el 44% dijeron que la tecnología que utilizan en su vida personal es mejor que la que disponen en la oficina.

La mayor parte de los cambios que se van a fraguar de aquí a diez años van a tener su punto de partida en la colaboración online, que se está convirtiendo en una realidad en el lugar de trabajo. Sobre todo porque permite la posibilidad de aportar e intercambiar ideas e innovación en muy poco tiempo (cuando hasta ahora se podía tardar años o incluso siglos).

El área de Recursos Humanos tendrá mayor responsabilidad en asegurar que los empleados estén motivados para colaborar e innovar, además que proporcionará la infraestructura necesaria para hacerlo posible.