En muchas compañías, el grupo de catadores habría sido conformado por hombres, típicamente maestros cerveceros y otro tipo de expertos. Y tiene sentido. A juzgar por los comerciales televisivos, a los hombres les gusta la cerveza más que a las mujeres.

No obstante, la compañía británica SABMiller decidió hace varios años buscar más a fondo entre su personal catadores expertos, invitando a los especialistas en marketing, secretarias y otros a probar sus habilidades. Las mujeres sobresalieron, señala un artículo publicado en la página web de The Wall Street Journal.

"Descubrimos que con frecuencia, las mujeres son más sensibles a los niveles de sabor en la cerveza", revela Barry Axcell, jefe de los maestros cerveceros de SABMiller. Las mujeres entrenadas como catadoras opacan a sus contrapartes masculinas, agrega.

Con mayor práctica y constancia, los hombres deberían tener una clara ventaja como catadores, ya que consumen 72.8% de las cervezas que se venden en el mundo, según datos de la firma Datamonitor Group. Sin embargo, SABMiller, productor de Águila, Cristal, Peroni y Pilsner Urquell, entre otras marcas, dice que su experiencia empírica muestra que las mujeres son el sexo fuerte a la hora de detectar algunos químicos indeseables.

Encontrar a los mejores catadores es crucial en la industria cervecera, ya que éstos son los encargados de que cada cerveza se ajuste a las características particulares de cada marca, además de que ayudan a las empresas a decidir cuánto tiempo permanecerán frescas sus bebidas en las tiendas y qué nuevos productos lanzar al mercado.

Actualmente, 30% de los 1.000 catadores de nivel avanzado de SABMiller son mujeres, señala Axcell. El número de catadoras se ha cuadruplicado en los últimos 10 años.

"Algunos hombres ven rojo o café y las mujeres pueden distinguir los tonos", afirma Jason Pratt, un científico de levadura y fermentación que integra el mismo grupo de Dannenberg.

El año pasado, Pratt se llevó a casa el trofeo anual que MillerCoors otorga a sus mejores catadores. Pratt dice que ha buscado a catadoras como tutoras y escuchado con atención los consejos de mujeres como Sue Thompson, que dirige los paneles de catadores de MillerCoors, copropiedad de SABMiller y la canadiense-estadounidense Molson Coors Brewing Co.

"Hay más camaradería que competencia", explica. "Seamos honestos: nos pagan por beber cerveza".