T. CEMBRANOS

«La reforma laboral está hecha a espaldas de las mujeres y empeora la situación ya que no se ha tenido en cuenta su especial condición de mayor debilidad», aseguró ayer Elisa García Rodríguez, responsable del departamento de la Mujer de UGT antes de presentar los datos del proyecto Artemisa -cuyo objetivo final es facilitar el acceso y la permanencia de las mujeres en el empleo- en el Centro Universitario de Avilés. La sindicalista aseguró que la maternidad y la conciliación de la vida familiar y laboral son los principales problemas de las mujeres a la hora de incorporarse al mercado laboral de manera igualitaria. «Hay una falta de políticas públicas para incorporar plenamente a las mujeres; falta corresponsabilidad. La mayoría de las mujeres, en torno al 70 por ciento, consiguen trabajos a tiempo parcial y de manera temporal», afirmó García. La responsable de UGT comentó que las mujeres trabajan en empleos peor remunerados que los hombres: «Muchas de ellas están mejor formadas pero están en trabajos de una cualificación inferior».

En el acto del Centro Universitario también participó Clara Casiano, secretaria de Igualdad y Política Social de UGT Asturias. Aseguró que en la reforma laboral no hay artículo alguno que haga sesgo de género. «Antes se bonificaba a las empresas por contratar mujeres y era una medida positiva. Con la universalización del contrato indefinido hemos perdido eso», comentó Casiano. A la presentación también asistieron, entre otros, Amado González, secretario de UGT de Avilés y Yolanda Alonso, edil de Bienestar Social.